Salsa típica de la cocina Italiana, su nombre viene de la pequeña ciudad de Amatrice en la región del Lacio.

La salsa Amatriciana es muy apreciada por los actuales romanos que la adoptaron de los pastores amatricianos los cuales, durante el período estival, frecuentemente se trasladaban hacia Roma para vender sus productos lácteos (especialmente quesos) y carnes ovinas y porcinas.

Se prepara con aceite de oliva, guanciale (panceta), guindilla, tomate y queso pecorino.