La carcamusa es un plato tradicional de la cocina castellana originario de Toledo.

Consiste en un guiso de carne de vacuno y magro de cerdo con verduras de la temporada (tomate, cebolla, apio, puerro, ajo, pimiento morrón, guisantes y patatas). Se sirve tradicionalmente en una pequeña cazuela de barro compañado de algunas rebanadas de pan.

Dicen que la denominación de este guiso se inventó en el Bar Ludeña de Toledo a mediados del siglo XX. Toma su nombre a partir de un curioso juego de palabras, pues el bar era frecuentado por clientes masculinos de cierta edad (los carcas) y por algunas señoritas más jóvenes, que ellos consideraban sus musas. Como el guiso era del gusto de ambos colectivos, en su honor se denominó carca-musas. Según otras opiniones, la palabra carcamusa tendría su etimología en «camush» (con shim final), que significa, en romance, «arrugado», de modo que «Car-camush» sería «carne arrugada».